En la mayoría de las crónicas se menciona a Cadbury, la famosa fábrica de chocolates británica, como la responsable de la primera caja de bombones a la venta, en 1868.

Aunque no parece estar muy claro el origen del primer bombón, la historia más conocida indica que fue creación del pastelero del rey Luis XIV, en pleno siglo XVIII. La idea primigenia surgió de unas fresas bañadas en chocolate, ofrecidas al Rey Sol, cuya expresión de aprobación y satisfacción es de dónde, algunos especialistas, insisten que surgió el nombre: “¡Bon, bon!”, ¡Bueno, bueno!